¿Os contamos un secreto? No hay nada como mirar al cielo en las noches claras de verano en La Adrada y sentirse libre y minúsculo a la vez. A los que os apasiona viajar ya lo sabréis, el cielo se ve muy distinto en las distintas partes del mundo, y en algunas es especialmente bello. La localidad de La Adrada cuenta con uno de esos cielos estrellados difíciles de olvidar.
Pasead por el centro de la localidad, contemplando sus casas, disfrutando de los bellos rincones escondidos y perdiéndoos en sus plazas. La plaza del Riñón en el lugar de encuentro de La Adrada. Esta bella plaza arbolada esta presidida por una fuente y la estatua de una niña, conocida como La niña de La Adrada. La oficina de turismo se encuentra también en este emplazamiento, os recomendamos visitarla y recabar información para planificar vuestro viaje.
Una construcción que atraerá vuestra atención durante un paseo por la villa es la Casa del tío Talís, por su sencillez y hermosura. Este edificio acabado con piedra natural y teja cerámica es el mejor ejemplo de la arquitectura tradicional de La Adrada. Especial mención merece su balcón volado, uno de los más fotografiados por los visitantes.
Haced una parada para refrescaros en la plaza del la Villa, donde se localiza una fuente del siglo XIX de la que brota agua limpia y fresca por sus cuatro caños. Esta plaza es hoy en día otro punto de encuentro, de baile y de celebraciones. El ayuntamiento domina la plaza, construido a finales del siglo XVIII y cuya fachada en piedra destaca y se hace protagonista entre el cielo azulado y el verdor de las cumbres.
Subid hasta el Torrejón, barrio típico de La Adrada, siguiendo Las Escalerillas, una calle con construcciones tradicionales de piedra natural, cerámica y carpintería de madera. Una vez en el Torrejón, paraos a admirar la belleza de las pintorescas calles y casas.
Pasead hasta el Castillo de la Adrada, situado en lo alto de una colina y reconstruido sobre las ruinas de una antigua fortaleza. El Castillo de La Adrada es en la actualidad el Centro de interpretación Histórica del Valle del Tiétar.
Recrearos por la Calle Larga, la calle señorial con los edificios de mayor valor arquitectónico de la población. Inaugura la calle la Casa de los Jerónimos, del siglo XVI, que perteneció a los frailes Jerónimos del Escorial.
En el Parque de La Nava está ubicada la Ermita de la Virgen de la Yedra, patrona de La Adrada. Su construcción comenzó en el siglo XVI sobre unas ruinas cubiertas de hiedra. Cuenta la leyenda que este es el lugar donde la Virgen se apareció misteriosamente en un muro cubierto de hiedra, y a pesar de ser devuelta en varias ocasiones a la abadía de donde procedía, la Virgen regresaba.
Visita el jardín botánico Valle del Tiétar, una finca de diez hectáreas que contiene unas 350 especies arbóreas, cerca de 450 arbustos y medio millar de flores y bulbos. La finca está enclavada en plena naturaleza, animando a los visitantes a recorrer sus sendas, contemplar las diferentes especies de aves, mariposas y ardillas.
La localidad de La Adrada se sitúa en la falda de la Sierra de Gredos, a 11 km del nacimiento del río Tiétar, por lo que recorrer el Valle del Tiétar por la infinidad de rutas interesantes que lo componen es obligatorio.
Ruta de los vinos, de los castros vetones, de los cerezos en flor, de los castillos, las posibilidades son muy diversas y para todos los gustos.
Este histograma muestra los patrones del clima en La Adrada. Los meses más cálidos en La Adrada son Mayo y Junio, con temperaturas de 42.2 ˚F. El mes más frío es Diciembre, cuando las temperaturas disminuyen hasta -10 ˚F. El mes más húmedo en La Adrada es Septiembre con 103.1 pulgadas de lluvia, mientras que el mes más seco es Junio con 2.3 pulgadas de lluvia.