Playas entre rocas y vegetación exuberante, un paisaje diseñado por los vientos y el mar de sinuosas formas: es la Costa del Cónero, un tramo de la costa de la región de Marche de increíble belleza y junto al mar Adriático. Portonovo es una de las bellas localidades que se encuentran a lo largo de la Riviera, equipadas con todas las comodidades para disfrutar de unas vacaciones de relax, entretenimiento y deportes. Portonovo es además meta muy frecuentada por los anconetanos y por los turistas, con sus bosques junto a la playa y sus antiguos monumentos.
En Portonovo se encuentran playas en abundancia, algunas amplias, equipadas y de fácil acceso; otras apartadas y accesibles sólo a través de senderos naturales o por barco, ideal para los que quieren vivir el mar en completa libertad. Dos acantilados, en un mar cristalino que a veces adquiere un azul profundo, es el espectáculo que se puede ver llegando a la playa de arena blanca de las “due sorelle” (dos hermanas), un pequeño paraíso, al que se puede acceder sólo por mar.
Situadas a los pies del Cónero, separadas por un acantilado vertical sobre mar, se encuentran otras dos joyas: la playa de las Rocas Negras e la de San Miguel.
Una roca que evoca ocn sus formas una gigantesca vela delimita la playa homónima de guijarros y grava, que marca el límite norte de la Riviera.
Portonovo brinda muchos puntos de interés turístico. Lugares mágicos para los amantes de la vela, para los apasionados del buceo, que podrán disfrutar de los hermosos fondos, y para aquellos que prefieren la canoa, medio ideal para llegar a los pies de los acantilados y explorar sus barrancos más estrechos. El Parque Cónero es el destino ideal para practicar senderismo, a caballo o en bicicleta de montaña. Un campo de golf equipado, ubicado en este magnífico escenario natural, está a disposición de los profesionales del deporte. Un buen vaso de tinto Conero DOC anticipa los intensos sabores de la cocina local con ingredientes tales como la pasta casera, el pescado fresco y las sabrosas carnes.