Ni es santa, ni es llana, ni tiene mar. Por eso Santillana del Mar es conocida como la villa de las tres mentiras.
El medievo reavivó a Santillana del Mar en todas sus manifestaciones. El cuerpo y alma de este municipio de la comunidad española autónoma de Cantabria son las cuevas de Altamira, conocidas y reafirmadas como la capilla sixtina del arte rupestre.
Su conjunto histórico cultural, la diversidad de su fauna y flora, y su antigüedad congénita han hecho de ella una villa distinguida y uno de los pueblos más bonitos de España.
Por supuesto, la primer visita aconsejable es a las Cuevas de Altamira. Es muy importante incidir en que ahora las visitas siguen un protocolo muy estricto de reservas y organización, por lo que vosotros debéis de ser precavidos y organizar vuestra visita con antelación suficiente para vuestros planes. Sin embargo, sí se puede visitar sin problemas la réplica de las cuevas de Altamira, en la Neocueva.
Las Cuevas de Altamira están situadas dentro del Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira. En las cuevas podréis ver una magnífica representación del arte rupestre del paleolítico.
De relevante interés arqueológico es el Castro del Cincho, en el que los aguerridos cántabros lucharon contra los romanos en las Guerras Cántabras, situado en Yuso.
Conjugando varios estlios arquitectónicos, en Santillana del Mar se puede ver la Colegiata de Santa Juliana, una mártir que no quiso renunciar de su fe, y cuyo edficio actual data del siglo XII.
Cincuenta bonitas estatuas os deleitarán en el Museo y Fundación Jesús Otero, en la Plaza del Abad San Francisco. El zoólogico de Santillana del mar os presenta más de dos mil especies animales, procedentes de todos los lugares del mundo.
El museo diocesano es una auténtica demostración de todo tipo de arte clásico, principalmente cantería y escultura, pero también de muchas otras especialidades, tanto en ámbito nacional como extranjero.
Palacios y torres también se pueden visitar en Santillana del Mar.
El senderismo con rutas guiadas, el ciclismo, y las actividades multiaventura se pueden practicar fácilmente en Santillana del mar.
En Santillana del Mar podéis encontrar fácilmente un alojamiento, como una vivienda rural o un apartamento rural, para el alquiler íntegro. Un buen lugar es la Posada de la Llosa.
Cualquier época del año es buena, aunque julio y verano se estiman los mejores en cuanto a climatología.
El cocido montañés, los calamares también llamados maganos, el chuletón de Tudanca son platos típicos de Santillana del Mar. En general, buenas carnes y pescados. Un bizcocho especial de Santillana del Mar es la llamada tableta. Los postres caseros están deliciosos.
El Museo y Fundación Jesús Otero abre sus puertas para que artistas del lugar y foráneos expongan sus trabajos a lo largo del año, por lo que, si estamos atentos, podemos disfrutar del arte. Del 28 al 30 de junio se celebran las fiestas de Santa Juliana, patrona de Santillana del Mar. En mayo tiene lugar el Festival Internacional de Títeres de Santillana del Mar.
En la Robleda hay un parque infantil. Las excursiones de senderismo, las visitas culturales, disfrutar de las fiestas, degustar su buena gastronomía... La familia entera está invitada a disfrutar.
Este histograma muestra los patrones del clima en Santillana del Mar. El mes más caluroso en Santillana del Mar es Abril, cuando las temperaturas máximas alcanzan los 36.4 ˚F. El mes más frío es Diciembre, cuando las temperaturas disminuyen hasta -1.9 ˚F. El mes más húmedo en Santillana del Mar es Febrero con 172.2 pulgadas de lluvia, mientras que el mes más seco es Junio con 10.9 pulgadas de lluvia.