La grandeza pura que contiene La Vera de Moncayo en sus tierras está impregnada de una gran cantidad de bellos y maravillosos paisajes, desde arquitecturas renacentistas, hasta adaptaciones propias de su gente, mencionando así la clásica estructura que utilizaron para levantar sus casas. Este destino es ideal hasta para tomarse un chocolate caliente o deleitarse en sus originales restaurantes que unen un estilo acogedor con otras influencias que alberga el área. Del mismo modo, la esencia única de su naturaleza inspira una reconfortante y constante paz.
La Vera de Moncayo brinda su distinguida atracción turística comenzando con la Iglesia de la Natividad y la Ermita de la Aparecida. Está demás decir que visitar este lugar es imperativo, ya es una de las joyas primordiales que esconde la comarca en sus características zonas.
El Yacimiento de la Oruña, es un entorno natural paradisíaco en donde podéis observar las ruinas del poblado cibeltérico rodeado de pinos y grandes montañas, además de disfrutar de la única y particular flora y fauna que ahí se presenta.
Asimismo, el Castillo, es una majestuosa prueba de lo que puede hacer la naturaleza, ya que a través del tiempo, la mezcla del ámbito natural con su estilo gótico le brinda un aura espiritual única.
El Monasterio la Viruela, cuya finalización de obra fue en el año 1145, fue hecho a partir de ideas góticas y renacentistas enriqueciendo aún más la cultura de estas tierras.
La Iglesia de la Natividad, bajo una imagen mudéjar y renacentista, fue reconstruida en el siglo XVII con características renacentistas debido a que su creación data de la época medieval, mencionando en tal manera que su campanario con estructura clásica crea una perfecta armonía en conjunto a la aplicación de esta hermosa obra. Tiene sus grandes vías que se han mantenido debido a que se han venido restaurando para mejor admiración del público, la cual os podéis disfrutar a pie, en bicicleta o en caballo.
La seguridad de deambular en esta vía es muy alta ya que los automóviles suelen transitar muy poco, así que si os apetece incursionar por cualquiera de estas bellas calles recuerda que todo es seguro, placentero y tranquilo.
Nada mejor para olvidarse un tiempo de los problemas de la vida citadina que ir a Vera de Moncayo y simplemente dedicarte a todos los placeres que solo este destino te puede dar.
Al hablar de un excelente lugar para quedarse, están las casas rurales del centro del casco urbano, el sitio ideal en donde brindan alquiler vacacional a buen precio, adecuado a todo presupuesto, provee elementos como habitaciones dobles, chimenea, admisión de mascotas y mucho más para que la comodidad prevalezca siempre.
El mejor tiempo para visitar la Vera de Moncayo es en verano y en primavera, ya en estas estaciones se presentan fiestas folclóricas que bañan de alegría el pueblo en cuanto a cultura y tradición latente. Sin contar los innumerables platillos que se preparan durante todas estas festividades.
Este histograma muestra los patrones del clima en Vera de Moncayo. El mes más caluroso en Vera de Moncayo es Julio, cuando las temperaturas máximas alcanzan los 42.3 ˚F. El mes más frío es Diciembre, cuando las temperaturas disminuyen hasta -4.8 ˚F. El mes más húmedo en Vera de Moncayo es Febrero con 73.2 pulgadas de lluvia, mientras que el mes más seco es Abril con 3.8 pulgadas de lluvia.