Ciudatella de Menorca es una joya de piedra, la misma que viste las fachadas señoriales de sus palacios, adoquina las callejuelas que han sido dedicadas a los antiguos patrones de los gremios medievales y esculpieron las gárgolas de su catedral. Las piedras de Ciutadella narran una historia de tradicionalismo medieval, de nobles feudales y piratas turcos.
En ella pasaréis unas fenomenales vacaciones disfrutando de sus playas y de sus monumentos bajo un generoso sol.
Ciudatella tiene un aire señorial y recorrer sus calles estrechas del casco histórico evoca sensualidad y pasión, dar un paseo por el puerto hasta el Castillo de San Nicolás haciendo un alto y tomando una cerveza en la Plaza del Borne o en la Plaza de Ses Voltes, son algunas de las cosas que podéis hacer en esta ciudad.
Varios son los sitios que podéis visitar en este lugar: la Catedral de Menorca construida entre los siglos XIII y XIV encima de una mezquita antigua y es el edificio gótico más importante de la isla; la Plaza del Borne, cuyo obelisco conmemora la defensa de la ciudad ante el ataque turco de 1558; La Plaza de la Esplanada que junto con la anterior es el lugar elegido para la celebración de los actos multitudinarios; el Castillo de San Nicolás, construído a finales del siglo XVIII con la finalidad de defender el puerto de la ciudad; el Museo Municipal de Ciudadela, edifico del siglo XVII que os mostrará una colección de objetos prehistóricos; y el Puerto de Ciudatella, que es un lugar emblemático de Menorca muy hermoso. De igual forma podéis dar un un paseo y tomar un refrigerio en cualquiera de sus restaurantes.
En el puerto de Ciudatella se sucede la rissaga, que es un fenómeno natural que ocurre durante el verano bajo determinadas condiciones atmosféricas y consiste en que el mar oscila arriba y abajo hasta que se desborda.
Todo el casco antiguo de Ciutadella es un hermoso espacio peatonal, en el que lo primordial es disfrutar del paseo, tal vez tomando un helado o descansando y por qué no, en alguna de las terrazas dispuestas en las diferentes plazas pequeñas que se abren cada esquina.
Un paseo encantador es el Sos Voltes que no ha dejado de ser una estrecha zona porticada cuyo nombre verdadedo es el de Carrer de Josep Maria Cuadrado, con edificios pintados de colores pastel.
podéis practicar parapente desde el Monte Toro, en el que tendréis la oportunidad de divisar por completo el contorno de la isla e incluso si el día es muy claro, otear la costa mallorquina.
Ya cuando os encontréis al ras del suelo y si disponéis de varios días para conocer Menorca, es una buena idea recorrer en bici el Cami de Cavalls, un sendero de 185 kilómetros, que circunvala la isla.
En la isla aún existen playas vírgenes y cuevas a las que solamente se pueden llegar a través del mar y no hay mejor formar de visitarlas que en kayak. Si os cansa remar podéis descansar y daros un chapuzón y si lleváis gafas y tubo, podéis combinar la actividad con el snorkel.
Y también podéis practicar el flyboard, un sistema a través del cual podréis elevaros varios metros sobre el agua y hacer diferentes piruetas. También podéis tener el privilegio de bucear en una reserva marina donde está prohibida la pesca.
Ciutadella ofrece una variada oferta de alojamientos, en los que las familias pueden descansar a pocos metros de la playa en un alquiler vacacional con piscina privada y aire acondicionado entre otras comodidades. La zona de Ciutadella, tanto en el centro de la ciudad como las playas que hay en sus alrededores, está muy desarrollada turísticamente. Es una opción perfecta donde alojarse en Menorca tanto por lo bonita que es la ciudad, como por sus excelentes playas.
A 500 metros de la catedral de Menorca podéis encontrar hoteles con servicio de Wifi gratis, aire acondicionado y vistas al mar desde de sus hermosas terrazas.
Son muchos los alojamientos que podéis encontrar en la ciudad con transporte público muy cerca así como con campos en lo que hay piscina al aire libre.
La mejor época del año para visitar Menorca es entre mayo y octubre, porque el clima es cálido y perfecto para bajar a la playa. Aunque la temporada alta es entre junio y septiembre se puede visitar durante todo el año, aunque dependiendo de vuestros propósitos.
En el puerto os brindarán las mejores opciones de pescados y mariscos, incluyendo la caldereta de langosta. Si buscáis la mejor carne de la ciudad u otras especialidades de pescado, vuestra opción será la ruta Moli des Comte Asador.
Como en todas las islas los pescados y mariscos son habituales en las mesas de Ciutadella, a lo que hay que agregar sus buenas verduras, destacando la caldereta de langosta y las berenjenas rellenas.
Para satisfacer las ansias golosas de los postres, podréis degustar el flaó, los carquinyols, los panellets de Menorca, la coca bamba, y los amargos, entre otros.
Aquí cada festividad saca lo mejor que tiene la isla y la fiesta más famosa de Ciudatella se realiza el día de su patrón Sant Joan, la cual da comienzo el 23 de junio y dura de 3 a 4 días.
En estas fiestas religiosas, los menorquines se reúnen para admirar a los caixer o jinetes, bailando y abriéndose paso entre la multitud presente. Por la noche el primer día de la fiesta el pueblo se enzarza en una batalla de avellanas que llena las calles. Durante el resto de días está lleno de actos tradicionales siendo el caballo menorquín la atracción principal.
Este histograma muestra los patrones del clima en Ciutadella. El mes más caluroso en Ciutadella es Mayo, cuando las temperaturas máximas alcanzan los 39 ˚F. El mes más frío es Diciembre, cuando las temperaturas disminuyen hasta 1.2 ˚F. El mes más húmedo en Ciutadella es Marzo con 177.3 pulgadas de lluvia, mientras que el mes más seco es Julio con 0.3 pulgadas de lluvia.
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